Un día, cualquier día, y de pronto sabes que se te olvidó de qué se trata esta vida, lo qué es la vida, andas caminando por los pasillos de un tianguis y ves de todo, desde cabezas disecadas de venados, computadoras, cañas de pescar, herramienta, comida, relojes, películas, música, gente, mucha gente que habla, pregunta y compra y no entiendes nada de eso. Caminas y de pronto sientes que nomás es caminar entre pasillos y luego morirse. Sería bueno morirse cuando estás así, perdido. La ciudad y su cruce de sentidos y su caos y la necesidad de todos de salir adelante y tú con tu confusión, con tu brújula extraviada, tu boca reseca por la sed de sentir lo que sabías tan bien, lo que, ahora lo sabes, creías saber tan bien y ya no.
1 comentario:
Me encantó! siempre andamos perdidos...
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